Cuanto más pan hago en casa, más ganas tengo de hacer más, me encanta jugar con la harina y me sorprende que con sólo cambiar algunos ingredientes, los panes salgan diferentes en sabor, en color y en textura. Amasar me relaja…y el aroma de mi cocina me encanta.
Hablando de mi cocina, os diré que acabamos de renovarla y pronto os pondré un post con fotos de antes, mientras y después (before and after). Ha quedado muy bonita y práctica, no se parece en nada a como era antes…ya veréis, ya veréis…
Estos panecillos integrales están riquísimos, suaves por dentro y crujientes por fuera.
Ingredientes para 4 panecillos y una barra:
- 250 ml de leche semi
- 1 huevo
- 1 cucharadita de sal
- 20 g de miel
- 250 g de harina de fuerza
- 125 de harina de trigo integral
- 100 g de harina de centeno integral
- 25 g de harina de maíz
- 10 g de levadura fresca o 1 sobre de levadura seca de panadería
- 50 g de mantequilla en dados a temperatua ambiente
- Opcional: copos de avena para decorar
Cómo hacer los panecillos integrales tipo Viena:
Colocar todos los ingredientes, excepto la mantequilla, en el orden en que parecen, en un cuenco o en la amasadora.
Amasar y cuando todos los ingredientes estén unidos, añadir la mantequilla. Seguir amasando hasta obtener una masa lisa y homogénea.
Tapar la masa con un trapo húmedo o con plástico y dejar reposar hasta de doble su volumen.
Enharinar la mesa de trabajo, volcar la masa y dividirla en tantas porciones como barras queramos hacer y darles forma. Disponer los panecillos en una bandeja de horno previamente enharinada, tapar con un paño o un plástico y dejar levar hasta que doble su volumen.
Encender el horno a 200 ºC
Hacer unos cortes a los panecillos. Pincelar con leche y esparcir los copos de avena. Hornear hasta que estén doraditos. Sacar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla.
Esta receta la vi en: chocolatepimienta
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