La fondue de queso se hace en una marmita especial con un pequeño hornillito caliente debajo y se mantiene el fuego encendido todo el tiempo para que no se endurezca.
Ingredientes: para 4 personas
1 diente de ajo
400g de queso Gruyére
200g de queso Emmental
0’3 l de vino blanco semiseco
1 cucharadita de zumo de limón
2 cucharadas rasas de fécula (Maizena)
1 copa de kirsch
un poco de pimienta negra molida
Pan del día anterior cortado a cuadritos (200g por persona)
Modo de hacer la receta
Frotar el interior de la marmita con el ajo. Rallar los dos quesos y añadirlos a la marmita. Mezclar el vino, el zumo de limón y la fécula y añadir al queso rallado. Remover todo bien.
Calentar la preparación en el fuego de la cocina y remover constantemente en movimientos haciendo ochos para que el queso no se deshaga en hilos.
Añadir el kirsch y condimentar con la pimienta. Después de una breve cocción, y cuando se haya formado una pasta homogénea y cremosa, se traslada la marmita a la mesa y se coloca sobre el hornillo encendido. Una vez en la mesa, la fondue debe permanecer en constante y lenta cocción.
Modo de servir: Se pincha un trozo de pan en el extremo del tenedor y se sumerge en la marmita, se remueve un poco enrollando la masa de queso y dando vueltas al tenedor, para que no gotee el queso. Por último, se introduce el bocado a la boca. Pero, ¡Atención: el queso está caliente!